Columna dorsolumbar: Definición y 7 patologías asociadas

columna toracolumbar

Artículo revisado y aprobado por Dra. Ibtissama Boukas, médico especialista en medicina familiar 

¿Qué es la columna toracolumbar y cuáles son sus características anatómicas? ¿Cuáles son las patologías asociadas a esta importante región de la columna?

Esta explicación te dice todo lo que necesitas saber sobre la columna toraco-lumbar, esta zona de transición entre la espina dorsal y el Espina lumbar.

Definición y anatomía

Para entender la columna toraco-lumbar, primero hay que entender la anatomía de la espina dorsal y Espina lumbar.

Hay 12 vértebras dorsales (numeradas del D1 al D12). La alineación de estas vértebras a nivel del tronco hace que permitan mucha rotación.

Las vértebras lumbares son 5. A diferencia de las columna dorsal, estas vértebras en la parte inferior de la espalda no son muy móviles en rotación. Más bien, su alineación permite más movimientos de flexión y extensión.

La unión entre la última vértebra dorsal y la primera vértebra lumbar se llama columna toracolumbar (o bisagra toracolumbar). Corresponde al espacio entre las vértebras D12 y L1. (también llamado D12-L1).

Patologías relacionadas con la bisagra toraco-lumbar

Las últimas vértebras torácicas (D11 y D12), así como la primera vértebra lumbar (L1), son frecuentemente el sitio de patología y disfunción espinal.

En efecto, la columna toraco-lumbar sufre mucho estrés, en particular porque constituye una zona de transición entre el final de las vértebras dorsales y las costillas con las vértebras lumbares. Esto puede conducir a la degeneración e irritación de las articulaciones facetarias.

Específicamente, cuando las fuerzas de rotación de la columna torácica se transmiten a las vértebras lumbares (como en los movimientos de torsión), los tejidos circundantes deben absorber esta fuerza para proteger la columna lumbar de una rotación excesiva. Cuanto más se repiten estos movimientos (y van acompañados de cargas pesadas), mayor es el riesgo de irritación e inflamación de las estructuras vertebrales circundantes.

Además, las posturas estáticas para sentarse y pararse (especialmente cuando se mantienen durante largos períodos de tiempo) imponen una tensión adicional en la columna toracolumbar, lo que aumenta el riesgo de inflamación allí.

Aquí hay una lista de patologías de la columna toraco-lumbar:

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