Artículo revisado y aprobado por Dra. Ibtissama Boukas, médico especialista en medicina familiar
Ya sea estrés, ansiedad o poco apoyo moral, todos estos factores psicosociales son posibles causas del dolor de cuello. Este dolor a menudo se manifiesta como una tensión muscular que se extiende a los hombros y se acompaña de dolor de cabeza.
En el artículo se explica el vínculo entre el dolor de cuello y el estrés, y se ofrecen formas concretas de reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida.
Vínculo entre el dolor de cuello y el estrés
Imagina la siguiente situación: Te encuentras frente a un oso en medio del bosque. En respuesta a esta situación traumática, tu cuerpo reaccionará automáticamente. Esta reacción de estrés se llama “lucha o huida”. Entre las respuestas fisiológicas observadas ante este tipo de eventos se encuentran:
- un latido del corazón acelerado
- respiración rápida y superficial
- piel fria
- transpiración
- tensión muscular general
Esencialmente, estos cambios representan cómo el cuerpo se prepara para lidiar con una amenaza física percibida y ayuda a combatir el peligro circundante.
Aunque estas reacciones están diseñadas para hacer frente a las amenazas físicas, su cuerpo reacciona de la misma manera cuando el peligro no es tangible. De hecho, las situaciones estresantes, como un altercado con el cónyuge o una fecha límite en el trabajo, también pueden causar manifestaciones físicas como la tensión muscular.
Estas tensiones aparecen a menudo alrededor del cuello y afectan especialmente a los músculos trapecio, suboccipitales, escalenos, etc. Con el tiempo, esto puede causar dolor de cuello o de hombro. También puede haber dolores de cuerpo, migrañas o dolores de cabeza por tensión. Luego se establece un círculo vicioso donde el dolor aumenta la irritabilidad, la fatiga y, en última instancia, el estrés (que a veces conduce a la depresión).
Que hacer ? (14 consejos)
Existen varias estrategias que puede utilizar para reducir el dolor de cuello relacionado con el estrés. Entre los más efectivos, puedes probar los siguientes métodos:
- Aplique una compresa caliente o una botella de agua caliente en el área tensa.
- Practica estiramientos para relajar la musculatura cervical
- Dedica unos minutos a hacerte un automasaje
- Uso de aceites esenciales como terapia alternativa para relajar los músculos tensos
- Consulte a un profesional (fisioterapeuta, osteópata, masajista, etc.) para aliviarle
- Consultar un psicólogo si las situaciones estresantes persisten y afectan su salud mental y física
- Ajusta tu puesto de trabajo para que estés cómodo en todo momento.
- Evitar posturas estáticas prolongadas frente al ordenador o teléfono móvil.
- Favorecer un almohada ortopédica para dormir mejor por la noche
- Celebrar una buena higiene del sueño
- Opte por una dieta saludable y evite la cafeína por la noche.
- Haz una actividad relajante como el yoga.
- Practique ejercicios de respiración que promuevan la relajación (respiración diafragmática)
- Practique ciertas formas de meditación (como atención plena)
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Conclusión
El dolor cervical es un síntoma frecuentemente relacionado con el estrés y la ansiedad. Es una reacción fisiológica que el cuerpo pone en marcha para responder a una amenaza percibida. Aunque por lo general no es la causa principal del dolor de cuello, el estrés a menudo agrava la afección y retrasa la curación óptima.
Afortunadamente, existen varias modalidades de tratamiento destinadas a aliviar el dolor de cuello, reducir la tensión muscular y calmar la mente en el camino. Se pueden aplicar en casa o con la ayuda de un profesional de la salud.
Sin embargo, si los síntomas persisten y parecen empeorar, es importante aclarar el diagnóstico consultando a un profesional. También es crucial consultar al médico si experimenta signos y síntomas inusuales como se describe en este artículo.